Parece que las heridas del amor nunca llegan a sanar, y más aún cuando es un amor perdido por el caprichoso destino.
Con el paso de los meses, de los años, la herida se va cerrando como si de una costura se tratase por ese hilo que es el tiempo. Pero basta que aparezca la tijera del recuerdo para cortar y abrir de nuevo esa herida y esa huella que quedó en lo más profundo del corazón, dejando brotar todo sentimiento que quedó preso en ella.
LAS CICATRICES DEL ALMA SON LA PRUEBA DE QUE ALGUNA VEZ AMAMOS Y FUIMOS AMADOS...
No mires atrás Tati, tu siempre para adelante que la vida es un cachito de nada...
ResponderEliminarBesos guapisima
Gracias por el consejo MEME, lo intentaré, que es cierto que el tiempo vuela.
EliminarUn beso!
Bienvenido Antonio!
ResponderEliminarClaro que te voy a seguir, ademas es genial tenerte por aquí.
Un abrazo :)